1. GRACIAS PADRE IV Domingo
Mayo
de Pascua
15
Gracias, Padre,
porque nos has regalado a Jesús.
Gracias por su Resurrección,
porque vive para siempre.
Jesús es nuestro Buen Pastor
Gracias porque está siempre con nosotros y nos cuida,
como un Buen Pastor.
Gracias por la Iglesia, este Pueblo tuyo en el que,
desde nuestro Bautismo, vivimos la fe.
Gracias por todos los que dan su vida por los demás
como el Buen Samaritano.
Gracias por mis padres, mis hermanos,
mis amigos, mis catequistas
y mis profesores.
Gracias por todo, Señor.
acción católica
general
SECTOR
DE NIÑOS
Yo soy la puerta de las ovejas
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2. E
Con Jesús estamos en buenas manos. Solo tenemos que “en-
n aquel tiempo dijo Jesús: «En verdad, en verdad os digo: el que
no entra por la puerta en el aprisco de las ovejas, sino que salta trar por su puerta”... lo que es lo mismo... entrar en su rebaño,
por otra parte, ese es ladrón y bandido; pero el que entra por la querer que sea nuestro Pastor.
puerta es pastor de las ovejas. A este le abre el guarda y las ovejas atienden Y nosotros... como las ovejas, estamos llamados a conocer a
a su voz, y él va llamando por el nombre a sus ovejas y las saca fuera. Cuan-
do ha sacado todas las suyas camina delante de ellas, y las ovejas lo siguen, nuestro Pastor, a Jesús. Para poder distinguirle, poder seguir-
porque conocen su voz: a un extraño no lo seguirán, sino que huirán de él, le... y darlo a conocer a otras personas.
porque no conocen la voz de los extraños».
Como Buen Pastor, Jesús busca los buenos pastos para sus
Jesús les puso esta comparación, pero ellos no entendieron de qué les ha- ovejas. Y nos da lo mejor... se nos da a sí mismo, en la Eucaris-
blaba. Por eso añadió Jesús: «En verdad, en verdad os digo: yo soy la puer- tía. Jesús nos da la vida de Dios... su Padre.
ta de las ovejas. Todos los que han venido antes de mí son ladrones y ban-
didos; pero las ovejas no los escucharon. Yo soy la puerta: quien entre por
mí se salvará y podrá entrar y salir, y encontrará pastos. El la-
drón no entra sino para robar y matar y hacer estragos; yo
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he venido para que tengan vida y la tengan abundante». Juan 10
En tu vida... ¿qué personas encuentras que se preocupan por
P ara que la gente le pudiera entender lo que quería decir,
Jesús tomó el ejemplo de los pastores... que era un oficio
muy habitual en aquellos tiempos. Así, aquellas gentes sencillas
cuidarte, para que no te pase nada? ¿En qué lo notas?
podían entender que Él es el “Buen Pastor”.
Jesús es un Buen Pastor que cuida con cariño de su rebaño.
Como los buenos pastores, va delante de sus ovejas para que le Jesús nos quiere tal como somos... ¿Qué cualidades buenas
puedan seguir sin perderse... y estás conocen su voz. Solo que tienes? ¿Qué podrías hacer para hacerlas crecer?
en vez de ovejas... su rebaño somos nosotros,
todos los que le seguimos.
Un pastor conoce a todas sus ovejas... y dis-
tingue a unas de otras. A Jesús le pasa lo
mismo. Nos conoce por nuestro nombre y ¿Qué vas a hacer para seguir “entrando” por su “puerta”, para
nos distingue a unos de otros. Conoce per-
seguir formando parte del rebaño de nuestro Buen Pastor
fectamente a cada una de sus ovejas.
Jesús?
Jesús nos conoce personalmente: sabe nues-
tras virtudes y nuestros defectos. Y nos ama...
tal como somos. Además nos dice que no nos va a
abandonar. Porque así se comporta un Buen
Pastor... que es capaz de enfrentarse a los
peligros que puedan acechar a sus ovejas.